Publicado originalmente en El Vocero el 14 de febrero de 2023, y escrito por Stephanie López.
Desde 2020, InvestPR promueve la relocalización, la práctica de traer desde el extranjero la producción y la manufactura de bienes de regreso a los EE. UU., como una oportunidad para establecer más empresas manufactureras en Puerto Rico.
Aunque Ella Woger-Nieves, directora ejecutiva de InvestPR, no pudo revelar qué empresas están considerando ubicarse en Puerto Rico debido a cláusulas de confidencialidad, indicó que actualmente están trabajando en el proceso de establecer operaciones en la isla con diez prospectos de los sectores de biociencias, industria aeroespacial y tecnología.
"Al fin de cuentas, existe una oportunidad para atraer las relocalizaciones; estos son procesos que implican mucho tiempo y esfuerzo, y que requieren mucha colaboración. Estamos comprometidos a trabajar con el sector público, el sector privado, el ámbito académico y los gremios para aunar y maximizar nuestros esfuerzos", señaló la directora ejecutiva.
Woger mencionó que los argumentos a favor de la relocalización han cobrado mayor interés debido a las condiciones geopolíticas, en particular desde el inicio de la pandemia, el conflicto entre los Estados Unidos y China, y también la guerra entre Rusia y Ucrania. Afirmó que estos eventos han desencadenado un reordenamiento global que ha aumentado el interés en la repatriación de activos estratégicos.
Con respecto a los desafíos más apremiantes que enfrenta Puerto Rico para alinearse a esa estrategia, la directora ejecutiva hizo alusión al tema de la energía como uno de los factores principales.
Este desafío se agudiza con la versión más reciente del Plan de Ajuste de Deuda de la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico (AEEPR), en la que la Autoridad de Control Fiscal propuso agregar una tarifa de conexión de $1,800 al mes para las grandes empresas, proporcional a su tarifa actual.
"Reconocemos que el tema de la infraestructura energética es un desafío; sin embargo, no necesariamente tiene que ser una barrera para hacer negocios en Puerto Rico", dijo Woger-Nieves. "Pero nunca antes Puerto Rico había tenido acceso a tantos fondos federales para reparar la infraestructura de energía eléctrica. Esos arreglos no van a tener lugar de la noche a la mañana, pero es algo que definitivamente comunicamos cuando hablamos con los prospectos", agregó.
Por otro lado, Woger-Nieves resaltó los objetivos que tiene la isla para llegar a un 100% de fuentes de energía renovable para 2050.
"Cuando hablamos con prospectos y empresas en este tipo de industria, lo que hacemos de inmediato es adecuar las necesidades energéticas de esa operación a soluciones de energía renovable", explicó.
En cuanto al nivel de competitividad de Puerto Rico en comparación con otros países latinoamericanos, en los que las empresas pueden optar por realizar esfuerzos de deslocalización cercana (trasladar una operación comercial a un país cercano), Woger reconoció que los costos operativos no son necesariamente competitivos. Sin embargo, considera que ser territorio estadounidense es una gran ventaja para la isla.
"El hecho de ser territorio de los EE. UU. significa que Made in Puerto Rico es equivalente a Made in the USA. Eso es sumamente importante para estas iniciativas porque se presenta con el mismo marco normativo y jurídico, protección de la propiedad intelectual y todo lo que conlleva ser territorio estadounidense. Es una ventaja", dijo la directora ejecutiva.
A pesar de que la industria de la manufactura en Puerto Rico no se puede comparar con el auge que tuvo en las décadas de 1980 y 1990, Woger indicó que "el empleo en el sector de la manufactura en la isla se encuentra ahora en el nivel más alto de los últimos 10 años". Explicó que si bien la fuerza laboral no llega a las mismas cifras que antes, el desempleo está en un porcentaje históricamente bajo y que para aumentar la huella de relocalización en la isla, los esfuerzos deben dirigirse a la retención de empleados.
Woger-Nieves subrayó que el capital humano en Puerto Rico es una de las ventajas competitivas más importantes, en especial en el área de las biociencias y en la industria aeroespacial. "Otros países tienen costos de fuerza laboral que realmente son mucho más bajos que en Puerto Rico, pero la propuesta de valor aquí está relacionada con el hecho de que la manufactura avanzada de estos tipos de productos requiere talento altamente técnico y muy capacitado, con mucha experiencia técnica. La propuesta de valor de la isla no es la misma que la de otros países", agregó.
La organización prevé un crecimiento significativo en las áreas de ciencias biológicas, industria aeroespacial y tecnología.
Según InvestPR, en el sector de las biociencias, Puerto Rico es el centro de manufactura número uno de los Estados Unidos, en el que se fabrican ocho de los 15 productos farmacéuticos más vendidos del mundo.
Actualmente, en Puerto Rico existe una participación del 75% de fabricantes de dispositivos FDA Clase III (considerados de mayor riesgo y que pueden servir como soporte vital), y hay 30 empresas de dispositivos médicos que operan en la isla.
Con respecto al sector de tecnología aeroespacial, indicó que hay oportunidad de crecimiento ya que la tecnología fabricada para la industria de la defensa debe, por razones de seguridad, fabricarse en suelo estadounidense. "Es fundamental realizar estas actividades en los Estados Unidos por razones de seguridad comercial y para garantizar que las protecciones incluyan la propiedad intelectual de la tecnología de seguridad", dijo la ejecutiva.
Otras ventajas identificadas son los incentivos establecidos en virtud de la Ley 60 y el bajo costo por pie cuadrado de los espacios de oficinas Clase A en comparación con las ciudades estadounidenses.